Si hay algo que me gusta en un vestido son los escotes asimétricos que dejan un hombro al aire, si además es negro se convierte en un comodín, por lo menos en mi armario.
En el look que llevo hoy es protagonista el vestido del que os hablo, lo he usado hasta en el embarazo (aquí), porque al ser de un tejido algo elástico cabía mi abrriga de 8 meses sin problema y lo mejor es que no se ha dado de sí.
Lo combiné con las bailarinas atadas "nude" que ya habéis visto antes por aquí, un cinturón tipo cowboy de doble hebilla para restarle sobriedad, bolso bandolera, también negro, y una cazadora vaquera.
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